Accidente de Echarri y Martínez en un rodaje: lesiones y susto

Ni en un choque ni en una explosión ni cayendo desde un balcón. En el último día de filmación del thriller Peligrosa Obsesión, Pablo Echarri y Mariano Martínez sufrieron un accidente de la manera más zonza. Ambos iban encima de una moto sobre un trailer que la transportaba cuando ésta perdió estabilidad y los dos actores cayeron del vehículo al pavimento. Por suerte, no iban a gran velocidad y los autos que simulaban perseguirlos pudieron esquivarlos. El que llevó la peor parte fue Echarri, con una fisura. Martínez sólo tuvo raspones en la espalda.

El accidente ocurrió poco después del mediodía en la intersección de la avenida Juana Manso y la calle Maizales, en el barrio porteño de Puerto Madero, cuando los actores grababan una escena para el filme que la empresa Patagonik estrenará en un par de meses. "Los chicos estaban repitiendo una escena que se filma sobre un trailer llamado cameracar. La moto iba atada y ellos simulaban estar manejándola, pero al doblar en una curva la moto se soltó y cayeron todos al piso. Fue un susto enorme porque los chicos rodaron varios metros y atrás venían dos patrulleros y todos temieron que los atropellaran", contó a Clarín Marcelo Rey, representante de Mariano Martínez.

Pablo, que iba sentado adelante, apoyó la muñeca derecha al caer y sufrió una fisura, por lo cual volvió a su casa con el brazo vendado. Mariano, en cambio, cayó para atrás y sufrió unos cuantos raspones en un costado de su espalda. "Por suerte está bien, superando el susto. Sólo le recetaron una crema para la cicatrización. Mañana (por hoy) viajará al Sur a grabar un unitario", contó Rey.

Tras el accidente, los actores fueron trasladados de urgencia al Hospital Fernández, donde los médicos descartaron heridas de gravedad y les realizaron algunas curaciones. Todo fue tan rápido que hasta Antonio Echarri, el papá de Pablo, llegó al hospital cuando el actor ya estaba siendo trasladado a su casa en una camioneta de la productora.

Hasta última hora de ayer, Clarín intentó comunicarse con los responsables de Patagonik para saber su versión sobre el episodio, pero en la productora hubo silencio de radio.

En el momento del accidente, un fotógrafo del diario Crónica, Pablo Senarega, paseaba por el lugar con su novia y, no bien se acercó a tomar unas fotos, fue golpeado por miembros del equipo de producción de la película. "Me pegaron trompadas, hubo un forcejeo y me rompieron parte del equipo para que no fotografiara a los chicos", contó el reportero a la agencia Télam.

El accidente se produjo en el último día de filmación de la película Peligrosa Obsesión, un thriller dirigido por Raúl Rodríguez Pella, quien —según contaron los testigos— se puso furioso cuando el fotógrafo de Crónica tomó imágenes de los actores heridos. Ayer iban a grabar un par de escenas finales pero, como no eran fundamentales, no se repetirán. La película terminó acá.

Fuente: Clarin.com

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