washington.
EEUU ha abierto una investigación penal sobre un nuevo caso de
eventuales maltratos y torturas a prisioneros iraquíes a raíz de la
divulgación de unas elocuentes fotografías que dejan en muy mal
lugar a los efectivos estadounidenses.
En las imágenes, algunas difundidas ayer por
varios medios de comunicación estadounidenses y por la ca
dena de televisión qatarí Al Yazira, puede verse a soldados
sentados sobre los detenidos que están con sus rostros cubiertos y
esposados, o pisándoles en el pecho.
Hay otras que exhiben a prisioneros
ensangrentados, uno de ellos al lado de un uniformado que apunta a
su cabeza con una pistola.
Son fotografías que ponen, de nuevo, en entredicho
el comportamiento de las fuerzas estadounidenses y que pueden poner
en un serio aprieto al secretario de Defensa y máximo responsable
del Pentágono, Donald Rumsfeld, justo cuando acaba de ser confirmado
en el cargo por el presidente de EEUU, George W. Bush.
Y es que no es la primera vez que Rumsfeld y la
cúpula del Ejército están en el punto de mira y son objeto de duras
críticas por escándalos de este tipo.
A principios de este año salieron a la luz otras
fotografías, aún más brutales, que sirvieron de prueba para procesar
a varios efectivos estadounidenses por supuestos abusos y torturas a
reos de la prisión de Abu Ghraib, situada cerca de Bagdad.
En esa ocasión, podía verse a algún soldado
sonriendo y sujetando una cuerda atada al cuello de un prisionero
desnudo y tirado en el suelo de la cárcel o apuntando, como si fuera
con una pistola, a los genitales de un recluso, mientras se fumaba
un cigarrillo.
Las nuevas fotos fueron descubiertas por un
periodista en una página de internet, donde las colocó una mujer sin
identificar que aseguró que su marido las había traído de Irak
después de haber cumplido su misión en ese país, según informó la
cadena de televisión CNN.
>efe