Israel permitirá a las viudas
utilizar el semen de sus maridos
Las viudas israelíes podrán utilizar
el semen de sus maridos aun si no les dieron su consentimiento en
vida, bajo una nueva directiva descrita por expertos como sin
precedentes en el mundo del tratamiento de la fertilidad.
Las directrices legales del fiscal
general Eliyakim Rubinstein, divulgadas el jueves, evitarán a muchas
viudas israelíes una batalla judicial en el caso de que quieran tener
hijos de sus maridos fallecidos.
"En una situación en la que una
esposa esté interesada en tener un hijo con el semen del difunto es
adecuado permitirle que lo haga", declaró Rubinstein.
Sin embargo, Rubinstein señaló que
una viuda no podrá reclamar el semen si el marido hubiera indicado
expresamente en vida que no quería que se usara para la inseminación
artificial de su esposa después de su muerte.
La directriz también se aplica a las
viudas de parejas de toda la vida, pero no se extiende a los padres u
otros familiares.
Los médicos sólo tienen de 24 a 36
horas tras la muerte de un hombre para recoger el semen que puede ser
congelado y utilizado para la fecundación.
Las mujeres que han tenido que
recurrir a los tribunales para pedir el semen a menudo pierden ese
crítico plazo temporal.
Pero la nueva norma dará a las
clínicas médicas permiso para cumplir de inmediato los deseos de
procreación de la viuda.
La viuda podrá entonces someter una
petición oficial a un tribunal para el uso de la muestra seminal, el
que examinará entonces si el marido fallecido hubiera deseado ser
padre póstumamente.
La medida se convierte en ley de
forma efectiva si no es revocada por una apelación judicial o la
aprobación de legislación contraria.
Ambas cuestiones parecen poco
probables ya que los tribunales israelíes son generalmente liberales
en cuestiones de fertilidad, al igual que el Parlamento de uno de los
pocos países del mundo donde el gobierno paga el tratamiento de
fertilidad a sus ciudadanos.
Guido Pennings, miembro del comité de
ética de la Sociedad Europea de Embriología y Reproducción Humana,
dijo que no sabía de ningún otro país que permitiera a las viudas o
parejas de hecho utilizar el semen del fallecido sin consentimiento
previo escrito. |