Bethany Hamilton en una competición de surf en agosto de 2003 en Hawai.

LIHUE, Estados Unidos (AP) -- El agua estaba clara y no había indicios de peligro cuando una surfista de 13 años salió hacia las olas junto a su mejor amiga y al padre de ésta. Pero mientras Bethany Hamilton estaba tumbada sobre su tabla frente a la costa norte de la isla de Kauai, en Hawai, un tiburón la mordió una vez y luego desapareció, arrancándole el brazo izquierdo justo debajo del hombro.

"Nadie lo vio suceder. Ella empezó a gritar: 'Me mordió un tiburón", dijo su padre, Tom Hamilton.

Bethany Hamilton, que se encontraba estable después del ataque del viernes por la mañana, habló al respecto el sábado.

"Mi brazo colgaba en el agua, y entonces apareció y me mordió", declaró Hamilton al canal de televisión de Honolulu KGMB.

Agregó que el escualo tiró de ella, pero se agarró a su tabla y luego "se marchó".

Los médicos del Hospital Wilcox Memorial dijeron que la gran condición física de Bethany como surfista de competición la ayudó a sobrevivir al ataque.

"Fue una amputación muy limpia", declaró el doctor David Rovinsky.

"Esta es una mujer muy entrenada, y por ello puede soportar bien una gran pérdida de sangre", agregó.

La joven se preparaba para una segunda operación el lunes, dijo su padre.

Bethany fue atacada en una zona conocida como Tunnels, a unos 400 metros de Playa Makua, cerca de Haena.

En el momento del incidente, Bethany estaba practicando surf junto a su amiga Alana Blanchard, también de 13 años, y el padre de ésta, Holt Blanchard, dijo su familia.

Holt Blanchard aplicó inmediatamente un torniquete al brazo de Hamilton utilizando la correa de una tabla de surf, explicó la familia.

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