Por unos cuantos dólares, una tienda de Disney convierte a las nenas en pequeñas princesas

De repente, la Quinta Avenida neoyorquina se convirtió en un mundo de hadas y princesas. Las grandes jugueterías invirtieron sus buenos billetes y se lanzó una dura competencia por conquistar el corazón de las niñas... y el bolsillo de los padres

 La Quinta Avenida en Nueva York se está convirtiendo, poco a poco, en un mundo de juegos para los chicos. La juguetería F.A.O. Schwarz está en pleno proceso de renovación, sumando más juegos y eventos atractivos para ofrecerle a sus clientes. American Girl, el vendedor de muñecas históricas para nenas, el año pasado inauguró American Girl Place, un lugar con muchas actividades y entretenimientos basados en las muñecas que ya atrajo a 1,8 millón de visitantes, según la compañía.

Y, por supuesto, no podía faltar la tienda Disney, con ambientes dedicados a juegos interactivos y a la fabricación de joyas, stands para reservar vacaciones en Disney y un teatro en vivo como la Corte de Cenicienta, un lugar de entretenimiento de tres pisos que se inauguró el mes pasado y que aspira a convocar a nenas con sueños de convertirse en princesas, y también a los padres que estén buscando un poco de magia de Disney.

Allí las nenas toman el té y aprenden sobre las cuatro cualidades que debe tener toda princesa que quiera portar una tiara con joyas de plástico incrustadas: “inteligencia, gracia, criterio y honestidad”.

Convertirse en una princesa, claro, no es nada barato. Acceder a la Corte de Cenicienta cuesta 75 dólares si uno se registra vía Internet u 80 dólares, si lo hace por teléfono. Fabricar sus propias coronas le costará al visitante un promedio de 24 dólares. Las pulseras y los collares cuestan entre 6 y 8 dólares cada uno. La tienda también vende productos inspirados en Nueva York, accesorios para mascotas, golosinas y, también, juegos y muñequitos para los varones.

Y si las madres de las pequeñas princesas no se sienten conformes con una tiara de plástico, pueden optar por comprar sweaters por 340 dólares o bufandas por 260.

La tienda representa un giro estratégico para la Walt Disney Company, cuyas ventas minoristas vienen generando pérdidas desde hace mucho tiempo. En un intento por imitar el éxito de otros experimentos comerciales, particularmente el de American Girl Place, los ejecutivos de Disney aspiran a inyectar un poco de Disneylandia en Nueva York, aunque se estén desprendiendo de sus negocios en otras partes.

Disney recientemente firmó una carta de intención para vender sus más de 300 tiendas en Estados Unidos. Sin embargo, se espera que la línea de princesas de Disney, que incluye disfraces, coronitas y otros accesorios basados en heroínas como Cenicienta y Bella de “La Bella y la Bestia” le reporten 2.000 millones de dólares en ventas minoristas este año

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