En medio de tensiones tecnológicas con Estados Unidos, el gobierno chino planea inyectar entre 28.000 y 70.000 millones de dólares para fortalecer su sector de semiconductores. Este esfuerzo refleja el compromiso de Pekín por reducir su dependencia de empresas extranjeras, como Nvidia, que han dominado el mercado.

Detalles del ambicioso plan chino

Funcionarios del país están valorando un paquete de subsidios que podría oscilar entre 200.000 millones y 500.000 millones de yuanes. Sin embargo, los pormenores sobre la distribución de esos fondos y las empresas que recibirán apoyo aún están bajo discusión, según fuentes con conocimiento de las conversaciones.

Esta cantidad de capital se asemeja a la financiación que Estados Unidos ha destinado a su Chips Act, subrayando la seriedad del esfuerzo chino en el desarrollo de su propia industria.

Impulso a la independencia tecnológica

El estado chino está intensificando sus esfuerzos para disminuir su dependencia de fabricantes extranjeros y ha prometido apoyar a compañías nacionales como Huawei y Cambricon Technologies. Esta decisión se ha vuelto más crítica después de que la administración Trump permitiera la venta de chips a China.

La magnitud del paquete propuesto lo convierte en uno de los mayores programas de incentivos gubernamentales en el sector de semiconductores, justo cuando naciones de todo el mundo buscan asegurar la producción local de estos vitales componentes.

Un programa separado y estratégico

Este nuevo programa de incentivos operará de forma independiente a iniciativas ya existentes, como el Big Fund, que cuenta con 50.000 millones de dólares. No obstante, no se ha recibido respuesta del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información sobre este nuevo paquete.

Un panorama geopolítico cambiante

En este contexto geopolítico complejo, el presidente Xi Jinping ha afirmado que desarrollará la industria de semiconductores del país utilizando un enfoque integral que moviliza todos los recursos disponibles. La percepción de inseguridad sobre el acceso a la tecnología de EE. UU. ha llevado a una mayor urgencia en este desarrollo.

Con medidas de apoyo, empresas en la cadena de suministro de semiconductores están viendo un auge en sus negocios. Semiconductor Manufacturing International Corp., por ejemplo, está expandiendo su capacidad como socio clave de Huawei, a pesar de no contar con el equipo más avanzado para la producción de chips.

La posición de China en la carrera tecnológica

A medida que el sector tecnológico se adapta, las acciones de ciertas empresas, como Moore Threads Technology Co., han experimentado un aumento impresionante de más del 600% desde su entrada en el mercado. El enfoque de las autoridades ha sido claro: favorecer la adopción de componentes nacionales y priorizar la autosuficiencia tecnológica.

Por otro lado, las relaciones con Nvidia han cambiado drásticamente, con la firma estadounidense enfrentando restricciones en su participación en el mercado chino. Se espera que la tecnología de este país siga desarrollándose, aunque aún enfrenta un desfase significativo con respecto a los procesos más avanzados controlados principalmente por Taiwan Semiconductor Manufacturing Co.