El actor “Pepe” Monje reconoce que el sonido de la chicharra llamando a cubrir una emergencia le produce “la misma adrenalina” que el momento de salir a escena, y “el cuerpo me manda ponerme el traje y tengo ganas de subir a la autobomba”. Pero, a diferencia de lo que le ocurre al actor, para el bombero “el espacio de acción está abierto los 365 días y las 24 horas, porque el cuartel no tiene horarios” y mientras “en el escenario puedo jugar y volar, el cuartel me da un mayor contacto a tierra”. “No es como la actuación que tenés que tener tu estilo de trabajo, acá a un esquema y un equipo que respetar”, remarcó. “Me tengo que acostumbrar a escuchar órdenes y aceptar lo que digan mis superiores”, dijo. “Pepe” confesó que se siente “muy cómodo” con su nueva profesión y remara: “Mis compañeros tienen una disposición para el otro que es admirable”. Sostiene que en el cuartel de bomberos se pone el cuerpo de otra manera. “Siendo actor estoy más protegido. Las falencias en la actuación se pueden cubrir poniendo otro plano encimo, por ejemplo. En cambio acá lo único que te cubre es la ropa y el casco”. Pero, por lo pronto, deberá compatibilizar las dos ocupaciones, ya que la semana próxima también comienza a grabar la miniserie “La verdad” junto a Daniel Fanego y Julieta Díaz y a ensayar una obra para el ciclo “Teatro Abierto”.
Pepe Monje bombero
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