Bitcoin Sufre Caída Récord: Las Pérdidas Alcanzan Niveles Críticos
El mercado de Bitcoin enfrenta una de las presiones de venta más intensas desde el colapso de FTX, con pérdidas de inversores en niveles alarmantes.
El mercado de Bitcoin (BTC) está sufriendo una intensa presión vendedora, con pérdidas acumuladas por los inversores que alcanzan cifras no vistas desde el colapso de la exchange FTX en noviembre de 2022.
Este escenario resalta un significativo lavado de la demanda marginal, resultado principalmente de una venta masiva por parte de tenedores a corto plazo.
Un análisis de la plataforma de datos blockchain Glassnode indica que la magnitud y rapidez de estas pérdidas revelan una importante capitulación en el mercado.
¿Por qué las ventas son impulsadas por los tenedores a corto plazo?
Los analistas de Glassnode señalan que una gran parte de la liquidación actual es obra de los tenedores a corto plazo (Short-Term Holders – STHs), quienes compraron BTC recientemente y ahora venden a pérdida debido a la fuerte corrección del mercado.
Esta situación podría ser un indicativo de que un «fondo local» esté cerca, especialmente si el precio logra recuperar rápidamente la base de costo de estos inversores, según el análisis de CryptoQuant.
Un vistazo a crisis pasadas y perspectivas futuras
El regreso de pérdidas a niveles similares al colapso de FTX reviven recuerdos de crisis previas en el mercado cripto.
Recientemente, el precio de BTC se encuentra en torno a los u$s83.000, representando una caída del 36% desde su máximo histórico de u$s126.210 a principios de octubre.
En 2022, tras el colapso de FTX y otros acontecimientos como el de Terra Luna, el valor de BTC cayó de aproximadamente u$s33.000 en mayo a menos de u$s16.000 en noviembre.
Históricamente, tras tocar fondo, Bitcoin ha enfrentado presiones antes de iniciar un nuevo ciclo alcista.
Sin embargo, a pesar de la turbulencia actual, figuras destacadas del sector mantienen un enfoque optimista. Por ejemplo, Tom Lee, cofundador de Fundstrat Global Advisors, ha pronosticado un posible rebote con precios que podrían oscilar entre u$s150.000 y u$s200.000 para enero de 2026.
Los inversores observan atentamente si esta ola de ventas es un signo de limpieza final de la especulación excesiva o si la corrección se prolongará, mientras los tenedores a corto plazo procesan sus pérdidas y el mercado busca establecer un nuevo punto de soporte.
