Que iba a bajar retenciones, devaluar e unificar el tipo de cambio nadie lo dudaba. Pero que al mismo tiempo iba a tomar medidas “a lo Cristina Kirchner” para intentar compensar la pérdida del poder adquisitivo producto del traspaso a precios de la suba del dólar resultó una sorpresa de los primeros días del gobierno de Mauricio Macri.
Antes de iniciar su descanso de diez días en la Patagonia, el jefe de Estado completó una semana de medidas económicas que, superado el cepo con un tipo de cambio controlado, apuntaron a tejer un fin de año con paz social, y llegar a enero para lanzar un pacto con empresas y sindicatos que alinee expectativas de cara a las paritarias que arrancan en marzo.
La ortodoxia financiera se completa así con pragmatismo peronista: el anuncio, por ejemplo, de que por “deslizamiento de precios” habrá una inyección de $ 3.300 millones por única vez para los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo y por embarazo, y para los que cobran la jubilación mínima. Se trata de un plus de $ 400 para quienes reciben $ 837 por AUH o $ 4.200 como haber jubilatorio. El impacto fiscal es mucho menor a los cerca de $ 60 mil millones que el Gobierno volcó al campo con menos retenciones y salto cambiario, pero sobre todo se trata de un gesto de que hay medidas que Cambiemos está dispuesto a tomar, aunque muchos no lo esperaban.
En honor a Moreno. En igual sentido, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, encabezó negociaciones con supermercadistas y empresarios de la alimentación, y anunció la continuidad del plan Precios Cuidados, creado por el kirchnerismo, con aumentos autorizados del 5% para el primer trimestre. En la negociación intervino el secretario de Comercio Interior, Miguel “Mike” Braun, que ocupa el cargo del otrora cuco de los comerciantes Guillermo Moreno en tiempos de Cristina Kirchner, “pero que no se parece en nada a Moreno”, dijo el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay.
Los supermercadistas, en tanto, reaccionan en cada fin de año por la inercia de diciembre y mantuvieron a través de la Asociación de Supermercadistas (ASU) múltiples reuniones en los últimos días con representantes del Ministerio de Seguridad que encabeza Patricia Bullrich. El fantasma de los saqueos se internalizó hace años, y este año estimuló precauciones con el peronismo fuera del poder. “Fueron contactos para estar alertas”, explicaron fuentes al tanto de las negociaciones de los híper.
En honor a Kicillof. En paralelo, el ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, un cruzado de la libertad de precios cuando lideraba Shell, se contactó con sus ex colegas petroleros para pedirles, como en otro momento lo hubiera hecho el ex ministro Axel Kicillof, que limiten los aumentos de precios en surtidores producto del nuevo valor del dólar oficial. En ese plano, hay un proyecto oficial que se enviaría al Congreso en marzo para bajar los impuestos a las naftas y de esa forma evitar aumentos.
Minihomenaje a CFK. Pero más allá del sostén al consumo y la búsqueda de contención social con fondos para beneficiarios de planes, un ancla momentánea contra la inflación ha vuelto a ser el dólar, que con un tipo de cambio en $ 13,30 resulta un freno para las expectativas del costo de vida y un límite para las remarcaciones luego de que varios se anticiparan con aumentos basados en un costo de reposición con el dólar a $ 15, que hasta ahora no se registró. Mientras hablan de volver a las metas de inflación, el dólar quieto se vuelve un aliado heterodoxo.
Inflación: ‘buenas noticias’, pero malos augurios
El Gobierno intenta moderar expectativas inflacionarias y estima que habrá “buenas noticias” en enero sobre precios, mientras que los economistas prevén que la inflación se acelerará en el corto plazo como consecuencia de la devaluación y la liberación de exportaciones.
De acuerdo con un análisis de Ieral-Fundación Mediterránea, el traslado de la devaluación a precios, la suba de tarifas en enero, la baja de retenciones y eliminación de restricciones a la exportación impactarán en inflación, que estará por arriba del 2% mensual. Para el jefe de Gabinete, Marcos Peña, se puede llegar a un acuerdo con los empresarios en enero. Aunque según el titular de la Cámara de Comercio, Carlos De la Vega, “los únicos precios que van a bajar son los que se han fijado con un dólar de 14, 15 y 16 (pesos)”.
El diagnóstico del Ieral apunta a corregir el déficit fiscal para contener la inflación “y guiar las paritarias”, además de recurrir al crédito externo para reducir la emisión monetaria, dice el trabajo.
Fuente: http://www.perfil.com/economia/Sostener-el-consumo-a-lo-Cristina-la-sorpresa-del-Gobierno-para-el-verano-20151226-0012.html