Este operativo, que se llevará a cabo hasta el 8 de diciembre, se lanzará desde el Centro de Atención al Vecino “Dolores Norte” y movilizará a 120 colaboradores para realizar un exhaustivo relevamiento en diversos sectores de la ciudad. Su objetivo: identificar la presencia de criaderos y evaluar el índice larvario en los hogares.

Qué es el operativo LIRAa

El director de Epidemiología, Fabricio Tejerina, destacó la importancia de este operativo: “Realizamos un diagnóstico preciso en campo que nos permite contar con datos concretos para definir las acciones a tomar y prevenir enfermedades”. Este compromiso no cesa con la finalización del operativo; es parte de un trabajo continuo que se ejecuta durante todo el año.

Tejerina enfatizó que la intervención no solo busca intervenir durante una temporada específica, sino que es parte de un esfuerzo sostenido que el municipio realiza para hacer frente a estas dolencias. “Es una oportunidad para llegar a nuevos hogares, conversar con las familias y comunicarles las medidas preventivas que deben adoptar”, aseguró.

Metas del Operativo

Durante esta edición, se prevé alcanzar un total de 6.500 viviendas tratadas, lo que permitirá obtener datos actualizados y precisos para orientar las futuras acciones de salud pública y fortalecer las estrategias de prevención en los barrios. La colaboración de la comunidad es esencial: los vecinos deben permitir el ingreso de los agentes calificados y asegurarse de eliminar recipientes que puedan acumular agua, clave para interrumpir el ciclo de reproducción del mosquito.