Préstamos rápidos y online: todo lo que debes saber

Para la mayoría de las personas y familias, los préstamos rápidos o urgentes representan uno de los instrumentos de financiación más eficientes que existen, tanto por la rapidez de aprobación como por los documentos que exigen las empresas prestamistas. Más allá de eso, hay otras informaciones que merecen ser conocidas.

Gracias al auge de internet y a la posibilidad que ofrecen sitios como creditandgo.es para comparar, buscar información sobre cada uno de los tipos de préstamos existentes en España -de los que encajan dentro de la figura de préstamos rápidos o urgentes-, el auge de este instrumento de financiación nativo de la era digital ha crecido exponencialmente, tanto del lado de los usuarios -que ahora cuentan con mayor información para tomar decisiones más inteligentes- como del lado de los proveedores, siendo más competitivos en cuanto a los servicios adicionales relacionados con un préstamo en cuestión.

Lo básico sobre este tipo de préstamos

Son préstamos con una tasa de interés un poco más elevada que otros tipos de financiación. Eso, que pudiera ser una desventaja, es en realidad la justificación del resto de sus ventajas, ya que ningún otro instrumento financiero en la actualidad tiene una rapidez de aprobación y una accesibilidad tal como la que ofrecen las plataformas de préstamos fáciles online.

Así las cosas, se caracterizan por:

• Aprobarse en menos de 24 horas desde la solicitud.
• Tener un tiempo de devolución que va desde 7 días hasta 1 mes, como máximo.
• Poder pedir cantidades que van desde los 100 euros hasta no más de 2.000 euros en muchas plataformas especializadas, lo que muestra una idea de cómo puede ser utilizado el dinero.
• Libertad absoluta de uso de los fondos, ya que no tienen restricciones ni políticas alusivas a ello.
• Creación de un historial crediticio con esas plataformas, por lo que cada vez será más fácil y más barato solicitar préstamos.

Consejos para solicitar un préstamo en el acto

En primer lugar, lo ideal es comenzar la búsqueda acerca de los mejores préstamos personales que se pueden encontrar en sitios como el que se mencionaba antes. Dichos comparadores ahorran mucho tiempo y acercan al usuario a la plataforma que por sus características se adapta mejor al perfil del solicitante.

Más allá de eso, algunos consejos pueden ser de utilidad para tener éxito al momento de solicitar un préstamo rápido y por internet:

• Utilización: antes de solicitar un préstamo, lo ideal es saber cuál será la utilización, y no porque la plataforma lo vaya a requerir -que no es el caso-, sino porque eso dará una idea de cuánto dinero realmente se necesita y cuál será la capacidad de pago posterior, ya que si el endeudamiento es negativo, será poco recomendable.
• Promociones: algunas plataformas ofrecen promociones, como tasa de interés nula en caso de devolver antes de tiempo el préstamo o que el primer préstamo sea gratuito, sin excepciones. Aprovechar esta clase de promociones, siempre y cuando se necesite acudir a la financiación, es bastante recomendable.
• Responsabilidad: utilizar el dinero ajeno conlleva responsabilidades. Lo mejor no es sólo reconocer que sí se necesita el dinero, sino que se debe escoger la plataforma que ofrezca mejores ventajas y hasta mejores números para tomar la decisión, así como también se debe tener en cuenta el hecho de que se debe devolver el préstamo en tiempo y forma, para generar un perfil responsable que permita mantener las puertas abiertas para próximas solicitudes.

La mayoría de las plataformas de préstamos rápidos tienen como principal característica el hecho de tener unas tasas de aprobación muy rápidas. Es esa la principal diferencia entre un préstamo de estas empresas y un préstamo bancario tradicional, que tardaría mucho más en aprobarse. Como las personas que necesitan préstamos suelen no tener mucho tiempo de maniobra, estas plataformas han sabido aprovechar el auge y la necesidad para ofrecer un servicio bien cohesionado y equilibrado en cuanto a calidad y coste. Escoger la correcta es casi tan importante como endeudarse para bien.