A pesar de que en muchos de los países de habla hispana la web de venta al por menor de AliExpress es muy conocida, no se habla tanto de la compañía que la fundó: Alibaba. El consorcio privado chino no solo ofrece este servicio, sino también venta business-to-business, servicios de almacenamiento en la nube y un motor de búsqueda de comparación de precios.
Este gigante asiático fue fundado en 1999 por Jack Ma y es una de las empresas asiáticas más fuertes que, además, no deja de ganar fuerza a nivel mundial. La compañía domina el 58% del total de ventas en el mercado e-commerce en China, y ofreció sus servicios a 636 millones de clientes en el total del año pasado.
Tal es su fuerza, que algunos de sus mayores rivales han tenido que retirar sus servicios en la República Popular, tras no poder competir con Alibaba y otras compañías locales que ofrecen servicios más económicos. De hecho, los márgenes de beneficio de Alibaba cuadruplican los de algunas de las mayores potencias en el ámbito e-commerce, lo que la hacen un atractivo indiscutible para los inversionistas.
El precio de las acciones de Alibaba actualmente está alrededor de 178 dólares. En cuanto a cifras, cabe destacar que la compañía china facturó 9.873 millones de dólares solo en el primer trimestre de 2018, lo que supuso un crecimiento del 62% en relación al mismo trimestre de 2017. Esto se debió a que, en la sección de comercio de Alibaba, las ventas aumentaron un 62%, los servicios de computación en la nube, un 103% y los medios digitales y de entretenimiento aumentaron en un 34%.
Con relación al año actual, la empresa está alcanzando un volumen de ventas de más del 60%. Tales son la evolución y los resultados, que los expertos de Wall Street han estimado un promedio de ganancias por valor de 6,54 dólares por acción en este año.
No obstante, como en todas las inversiones en bolsa, hay ciertos riesgos. Entre ellos, el marco político en el que se encuentran China y EE. UU. Sus relaciones comerciales se han visto afectadas por la decisión de Donald Trump de incrementar los aranceles del 10% al 25% sobre 200.000 millones de dólares en productos del gigante asiático y bajo la amenaza de incluir más productos en la lista. Una noticia como esta tuvo repercusiones en Wall Street, provocando la caída de las acciones en un 8,8% y cerrando la última sesión de la semana en 178 dólares.
A pesar de esto, las acciones han aumentado hasta casi en un 30% desde los mínimos registrados en enero y se mantiene la esperanza de que la economía del país permita a los consumidores chinos mantener la expansión de ventas de Alibaba.
Además, China pretende incrementar el gasto en 2 millones de yuanes y aumentar la concesión de préstamos a las pequeñas empresas. Esto contribuiría a la economía de los principales consumidores de la compañía de Jack Ma, lo que se traduce en un aumento de ventas en Alibaba y la continuación de su expansión.
En definitiva, se podría decir que, a pesar de que invertir en acciones de la compañía china podría suponer ciertos riesgos, su expansión y fuerza a nivel mundial hacen de Alibaba un negocio muy atractivo. De seguir sus planes de crecimiento y verse favorecida por la evolución económica de China, los inversionistas podrían obtener grandes resultados de la compra de acciones en Alibaba.