¿Qué métodos utilizaban en la antigüedad para la extracción de leche materna?

No existe evidencia científica que sustente como era el proceso de extracción de la leche materna en la antigüedad. Sin embargo, en algunos registros de historia y antropología mencionan la extracción de leche que le practicaban los esposos o una amiga cercana a las mujeres lactantes.

También se resalta un oficio de la época que se especializaba en este asunto. Todos aquellos que se dedicaban a practicar la extracción de leche de las mamás de las mujeres, eran llamados “mamones” y “mamonas”. Al parecer, ellos se calentaban las manos y luego las ponían encima de los pechos de las mujeres para extraer la leche.

En esa época, la leche materna era altamente valorada, ya que los que se dedicaban al oficio de extracción también la consumían directamente de los pechos. Cómo eran expertos en la extracción, sabían cuándo la leche estaba infectada debido a una mastitis y la escupían.

Este Método en la actualidad se le conoce como la extracción manual, pero las madres no pueden practicarla por sí solas, debido a que solo obtienen pequeñas cantidades o nada. Estudios más recientes lograron determinar que esas prácticas provoca daños en el tejido de las mamas.

Con el pasar de los siglos, este método fue quedando en el olvido. En la época del cristianismo se fomentó el cuidado de los niños y la participación de las nodrizas que tenían labores similares al de una niñera en la actualidad, pero su función principal era amamantar al bebé.

En el tiempo de los romanos dictaron normativas exclusivas para las nodrizas, que debían cumplir con un perfil y documentar las enfermedades que habían contraído, a fin de mantener las medidas higiénicas y prevenir contagios durante el tiempo de lactancia. De manera que, las mujeres enfermas, musulmanas y judías no podían ejercer funciones de nodrizas en bebés pertenecientes a una familia cristiana.

En la época del Renacimiento hubo un declive en la actividad de las nodrizas y más bien alentaron a las madres a ejercer una lactancia directa madre-hijo. Es por ello, que la crianza de los bebés se hizo más cercana con la madre para garantizarle una alimentación sana a sus hijos.

En cambio, en el siglo XX la lactancia pasó a un lado y las mujeres occidentales recurrían a la leche condensada como un método de alimentación para los bebés. Para el siglo XXI inició una campaña de concientización sobre la lactancia materna como el alimento más completo para los recién nacidos.

Aunque en países como México, solo una de cada diez mujeres trabajadoras amamanta a sus hijos, según cifras del Proyecto de Apoyo a la Lactancia Materna. El argumento más recurrente es que la vida va más deprisa y ellas tienen más compromisos laborales. Sin embargo, existen sacaleches que reducen el tiempo de extracción, así como recipientes para almacenar la leche materna en la heladera y discos protectores para evitar manchar la ropa luego de la extracción. Diferentes dispositivos y accesorios que se han adaptado a las nuevas necesidades de las mujeres lactantes.