Inquietud en San Vicente: ola de robos de aires acondicionados preocupa a los vecinos
Los residentes del barrio San Vicente en Córdoba viven momentos de tensión debido a una serie de robos de motores de aires acondicionados, que han dejado a varias familias en alerta y con miedo por su seguridad.
El auge de los robos nocturnos
En las últimas tres semanas, al menos cinco familias han presentado denuncias por la sustracción de motores de aires acondicionados en el barrio. Los robos, que tienen lugar principalmente de noche, afectan sobre todo a la zona de López y Planes y sus alrededores. Los vecinos indican que el cobre que contiene estos equipos es el principal objetivo de los ladrones.
Un patrón alarmante
Los primeros casos se registraron en un breve tramo de seis cuadras entre Ambrosio Funes y Tristán Narvaja. Sin embargo, la situación ha ido en aumento. “Todo comenzó hace dos semanas y, lamentablemente, han ido sumándose nuevos robos”, expresó una vecina, quien destacó un caso particularmente preocupante: el robo a una jubilada que vive sola.
Comunidad en alerta y organizándose
Jessica Cavina, coordinadora de acciones comunitarias, mencionó que el problema se hizo evidente a través de un grupo de WhatsApp, donde varios vecinos reportaron que sus aires no estaban funcionando. Al inspeccionar, descubrieron que les habían sustraído los motores. “Hemos contabilizado alrededor de doce casos en un rango de diez cuadras, entre comercios y casas particulares”, aseguró.

La falta de seguridad exacerba la preocupación
Los vecinos sospechan que los robos se producen principalmente durante la madrugada, cuando la presencia policial desciende notablemente. Jessica enfatizó que aunque hay patrullas en horas del día, a partir de las 20 horas la seguridad se vuelve escasa. “Es en la noche cuando estos hechos ocurren, y eso nos genera mucha inquietud”, comentó.
Además, la burocracia al momento de denunciar también ha complicado la situación. Una vecina compartió que ayudó a una jubilada a presentar su denuncia, un proceso que tuvo que realizarse a través del CiDi. “La comisaría está a solo dos cuadras, pero aun así se ha requerido homologar las denuncias, lo que ha hecho que el proceso sea tedioso”, indicó.
Ajustando medidas de seguridad
Ante la creciente inseguridad, varios residentes han comenzado a reforzar sus medidas de seguridad. Algunos han soldado las cabinas donde se encuentran los medidores de gas, y ahora buscan herreros para instalar cajas de protección en sus aires acondicionados. “Es un gasto que no teníamos planeado, pero tenemos que protegernos”, afirmó Jessica.
Solidaridad vecinal y llamado a la acción
A pesar de la falta de apoyo por parte de las autoridades, los habitantes están trabajando juntos para cuidarse mutuamente. Se organizan para acompañar a quienes llegan a casa por la noche y mantienen una comunicación activa en grupos comunitarios. “Nos ayudamos entre todos porque sentimos que la respuesta policial no es suficiente”, concluyó.
Los residentes de San Vicente reclaman urgentemente mayor presencia policial y patrullajes frecuentes en las áreas más afectadas. “Solo pedimos que se comprometan a recorrer estas calles después de las 21 horas”, expresaron.
