La Cámara de Senadores convirtió en Ley la creación de la Junta de Seguridad en el Transporte, un organismo descentralizado en la órbita del Ministerio de Transporte de la Nación que extenderá el alcance de la actual Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) hacia todos los modos de transporte.
La función principal de la Junta será investigar los accidentes aéreos, automotores de pasajeros o carga, ferroviarios, fluviales y marítimos, y emitir recomendaciones con el objetivo de promover la cultura de la seguridad y prevenir futuros accidentes e incidentes.
Uno de los mayores beneficios de la creación del organismo es que permitirá separar al regulador de la investigación, tal como ocurre en otros países que cuentan con organismos multimodales como Estados Unidos y Japón.
La nueva junta adoptará el mismo modelo sistémico de investigación empleado por la JIAAC desde 2013, que toma en cuenta todos los actores del sistema para llevar a cabo sus investigaciones.
También podrá solicitar asistencia a cualquier otro organismo competente y deberá “reportar sus actividades, hallazgos y recomendaciones para cada año fiscal al Presidente de la Nación y al Honorable Congreso de la Nación, durante el mes de marzo de cada año calendario”, según establece la nueva ley.
Si bien la Junta de Seguridad en el Transporte tendrá su sede principal en la Ciudad de Buenos Aires será de perfil federal y tendrá representación en cinco regiones del país: Noroeste (Catamarca, Jujuy, La Rioja, Salta, Santiago del Estero y Tucumán); Noreste (Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones); Cuyo (Mendoza, San Juan y San Luis); centro (Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y la Ciudad de Buenos Aires); y Patagonia (Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego).