Conflicto en el Senado: Senadora Denuncia Agresiones por Parte de Seguridad
Un incidente alarmante ha sacudido el Senado de la Nación, donde la senadora Cristina López presentó una denuncia penal por agresiones físicas y amenazas tras un forcejeo con el personal de seguridad.
Este lunes, un violento altercado se desató en la Cámara Alta cuando la senadora de Tierra del Fuego, Cristina López, intentó recuperar su pertenencia de un despacho que había sido clausurado. López, acompañada de un cerrajero, se vio envuelta en un conflicto con los custodios que responden a la vicepresidenta, Victoria Villarruel. Según la legisladora, recibió un ataque físico mientras intentaba acceder a su oficina.
Un Ataque Impredecible en el Senado
El incidente ocurrió cuando López y el cerrajero encontraron la puerta de su despacho bloqueada con muebles. Al intentar superar la barricada formada por el personal de seguridad, la senadora fue lastimada en el forcejeo. La gravedad de las lesiones quedó documentada por el médico del Senado, Dr. Gustavo Apreda, quien detectó un hematoma en el tobillo derecho y dolores en el brazo.
Un Contexto Político Cargado
Este conflicto no es un hecho aislado. Tan solo unos días antes, López juró su cargo recordando a los «30.000 desaparecidos» durante la dictadura, un acto que, según muchos, podría haber irritado a Villarruel. La senadora denunció que, aprovechando la ausencia de personal en su oficina, la vicepresidenta cambió la cerradura y retiró su placa identificatoria, un acto que calificó de «gravedad institucional».
La Reacción de la Legisladora
En medio de la tensión, López expresó su preocupación sobre el precedente que significaría permitir que una autoridad senatorial restrinja el acceso a un legislador electo a su espacio de trabajo. «La titularidad del Senado pertenece a los senadores, no a la vicepresidenta», afirmó en un llamado a salvaguardar la autonomía del poder legislativo.
La Controversia del Despacho Cerrado
El centro de la disputa radica en la asignación del despacho que anteriormente pertenecía al senador saliente por Salta, Sergio Leavy. López y su equipo habían acordado el uso de ese espacio sin inconvenientes previos, algo que pone de manifiesto la arbitrariedad del suceso ocurrido este lunes.
Un Demanda por Justicia
Ante la falta de respuesta de Villarruel, López decidió intervenir con apoyo de la fuerza pública para recuperar su despacho, lo que desencadenó la agresión. «Este es un ataque a la autonomía del Congreso», subrayó, a la espera de que la justicia tome cartas en el asunto respecto a las responsabilidades del personal de seguridad y las órdenes políticas que podrían haber motivado tal intervención.
