La sensualidad que irradia el cuerpo de la modelo norteamericana Tara Lynn es tan intenso que ni siquiera sus medidas, poco convencionales para la profesión que eligió, le han impedido subir varios escalones en el difícil mundo del modelaje.
Pero lo cierto es que para esta nativa de Seattle no ha imposibles y por eso, no sólo logró una exclusividad con la agencia IMG Models sino que también ha logrado conquistar a las más exigentes editoras de las revistas de modas.
Por eso, no fue de extrañar que su cara y su cuerpo ilustraran las tapas de las revistas V Magazine, Elle, Vogue e inclusive en Time. Lo que se dice, una carrera bien cimentada en la belleza y el talento de una chica que antes de dedicarse a esta carrera trabajó en un kiosco, en una granja y en un restaurante de comidas rápidas.