La flota presidencial será reemplazada con 8 aviones alquilados
El Gobierno decidió alquilar una flota de ocho aviones privados para reemplazar a las aeronaves oficiales que trasladan al presidente Mauricio Macri. La Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Fernando De Andreis, lanzó en agosto una licitación para contratar el servicio de transporte aéreo doméstico e internacional de la comitiva oficial durante 12 meses, con opción a extender ese requerimiento por otro período idéntico o menor.
En la licitación se les exige a las empresas que tengan naves disponibles para cubrir en el período de un año una distancia de 204.000 kilómetros en aviones y 150 horas de vuelo en helicóptero.
Además, la Secretaría General les pidió a las compañías interesadas que coticen el alquiler de cuatro jets, cuatro aviones turbohélices y dos helicópteros, según publica este lunes el diario La Nación. En el caso de los primeros, deben tener asientos VIP tanto para vuelos nacionales como internacionales. Además, deberán agregar un presupuesto para el pernocte nacional e internacional.
El Gobierno estima que los traslados presidenciales por el lapso de un año demandarán un presupuesto de 36.393.811 pesos, es decir, unos 2,41 millones de dólares. La cotización debe ser en dólares, pero los pagos se harán en pesos tomando en cuenta la cotización del dólar vendedor del Banco Nación al día anterior.
Según se indicó, la reparación del emblemático Tango 01, que se compró durante la administración de Carlos Menem, requiere un desembolso de unos 20 millones de dólares. Se rematará entonces a fines de año junto con el Tango 04, que fue adquirido por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, tal como ya había informado DIARIO POPULAR.
Mientras tanto, el Tango 02, que tuvo problemas en un vuelo reciente que Macri emprendió desde Córdoba hasta Buenos Aires, también quedó desafectado, al igual que tres helicópteros Sikorsky. A pedido de Presidencia de la Nación, las aeronaves que trasladen a Macri no podrán tener una antigüedad superior a los 20 años. Además, los jets tendrán que alcanzar una velocidad mínima de 800 kilómetros por hora y de 400 kilómetros para los turbohélice. Los helicópteros, en tanto, tendrán que andar a un mínimo de 190 o 240 kilómetros por hora, según cada caso.
Las empresas, además, dice el texto de la licitación, deberán presentar planes de contingencia «en caso de situaciones que puedan causar demora o interrupción en la prestación del servicio», aceptar los controles previos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, la Casa Militar o la Dirección General de Logística y estar preparadas para tomar un pedido presidencial con una antelación mínima de tres horas previas a la salida del vuelo.
En todos los casos se utilizará la modalidad de orden de compra abierta, por lo que los servicios se podrán utilizar pagando el precio cotizado, pero sin la necesidad de emplearlos en su totalidad.