La compañía aérea Malaysian Airlines comunicó a través de su web que el vuelo MH-17 tuvo que bajar su altitud de 35 mil pies a 33 mil pies por orden de los controladores aéreos de Ucrania poco antes de ser derribado. El avión venía a una altitud ‘optima hasta que recibió la orden. Mientras tanto, los rebeldes consideran dar una tregua para que se investigue el caso y la compañía enviará un grupo de 62 expertos para investigar la catástrofe
(Urgente24) – Un comunicado publicado por la página web de Malaysian Airlines señaló que los controladores aéreos de Ucrania ordenaron al MH17 bajar su altitud de 35 ml pies, cercana a la altitud óptima, a 33 mil pies
La compañía se asegura que la ruta del vuelo MH17 estaba aprobada por Eurocontrol, el órgano responsable de las rutas en el espacio aéreo de Europa.
El dato es no menor, si se tiene en cuenta que las autoridades ucranianas sabían que el vuelo comercial iba a sobrevolar una zona donde se desarrollaban combates y donde el derribo de aviones era frecuente.
Tregua
Los rebeldes prorrusos de la autoproclamada república popular de Donetsk están dispuestos a aceptar una tregua con las fuerzas de Kiev para que se investigue el accidente del avión malasio supuestamente derribado por un misil.
Así lo señaló hoy, según medios rusos, el viceprimer ministro de la formación separatista, Andrei Purguín, quien dijo que hoy tendrán lugar nuevas consultas del llamado Grupo de Contacto, integrado además por representantes de Rusia, Ucrania y la OSCE, para que se declare este alto el fuego.
«Estamos negociando sobre una tregua humanitaria de 2-4 días para investigar las causas del accidente del Boeing 777 en el cielo de Donetsk», dijo.
Purguín adelantó que los insurgentes están además dispuestos a garantizar el libre acceso para expertos al lugar de la caída del avión.
«Incluso estamos listos para dejar pasar (a la zona) a los investigadores ucranianos», agregó. El líder separatista explicó que el avión se desintegró en el aire y que «los fragmentos del Boeing y los cuerpos están diseminados por un área de 12 kilómetros».
Además, «el lugar del accidente está cercado por 600 personas (de los prorrusos), se les ordenó vigilar los fragmentos y los restos», aseveró.
Purguín negó que los separatistas se hayan apoderado de sistemas de defensa antiaérea «Buk», capaces de derribar aviones, una información que apareció ayer en algunos medios ucranianos.
Las autoridades de Malasia enviarán a Ucrania a un grupo de 62 expertos para investigar la catástrofe del avión de Malaysia Airlines que se estrelló la víspera en el este del país eslavo con casi 300 personas a bordo, declaró el ministro de Transporte del país asiático, Liow Tiong Lai.
“Malasia enviará hoy a Kiev una comisión especial para prestar apoyo y a un grupo de rescate. En total, 62 personas irán a Kiev. Entre ellos, 15 médicos, 10 militares de fuerzas aéreas de Malasia y dos representantes de la Dirección de Aviación nacional”, señala el comunicado ministerial.
Según el ministro, a bordo del avión había 173 holandeses, 44 malayos, 27 australianos, 12 ciudadanos de Indonesia, nueve británicos, cuatro nacionales de Alemania y Bélgica, tres filipinos, un ciudadano de Canadá y uno de Nueva Zelanda. Por el momento se desconoce la nacionalidad de otros pasajeros.
La lista completa, agregó el ministro, será publicada después de que las autoridades contacten con los familiares.
Tiong Lai mencionó que si se confirma la información sobre el derribo del avión, será “un crimen contra la moral”.
“Si este hecho se confirma, será una violación del derecho internacional y un crimen contra la moral”, destacó el ministro en una conferencia de prensa en Kuala Lumpur.
Con anterioridad, las autoridades de Kiev acusaron del derribo a los milicianos que a su vez declararon no poseer armas capaces de abatir una aeronave a 10.000 metros de altura.
El Boeing 777 de Malaysia Airlines, que cubría la ruta de Ámsterdam a Kuala Lumpur con 283 pasajeros y 15 tripulantes a bordo, cayó a 80 kilómetros de la ciudad de Donetsk, en una zona controlada por las milicias que luchan contra el Gobierno de Kiev.
Se sospecha que fue derribado por un misil antiaéreo cuyo lanzamiento ninguna parte reivindicó hasta ahora.