Este fin de semana, la tradicional peregrinación por la ruta nacional 12 hacia el santuario de Nuestra Señora de Loreto se vio marcada por una decisión sorpresiva: por primera vez en 24 años, la iglesia de Misiones tuvo que abonar un canon al Gobierno Nacional para permitir el desplazamiento de miles de fieles.

Un Canon Sorprendente al Servicio de la Fe

El sacerdote Leonardo Cuenca expresó su descontento en redes sociales, denunciando lo que considera un «nuevo impuesto» aplicado a los peregrinos, que en su mayoría recorren el camino a pie o en bicicleta. «En el país de la libertad, hoy hemos tenido que pagar más de 560 mil pesos al Estado Nacional para poder peregrinar», manifestó Cuenca, quien es el rector del santuario.

La Justificación Detrás del Pago

El cobro, exigido por Vialidad Nacional, fue clasificado como un arancel por la «intervención del camino», lo que generó malestar entre los organizadores del evento religioso. «Uno no entiende a qué se debe o cuál es la lógica desde la cual se manejan», cuestionó el sacerdote.

La Falta de Contraprestación

Cuenca continuó su crítica, indicando que, a pesar del pago, «la contraprestación de Nación es nula». En contraste, reconoció la colaboración de diversas instituciones como la Policía de Misiones y el Ministerio de Salud, que apoyaron la peregrinación sin solicitar un pago.

Una Tradición Sin Costes Previos

Históricamente, la iglesia solo debía abonar un seguro para los peregrinos, un requisito que no era obligatorio. «El impuesto fue pagado de manera online y es claro que es recaudado por ARCA», dijo Cuenca, subrayando que de no haber cumplido con este pago, no habría sido posible llevar a cabo la peregrinación.

Un Precedente Preocupante para Futuros Eventos

El sacerdote advirtió que este cobro podría sentar un incómodo precedente para otros eventos de fe. “No me incomoda el pago en sí, sino el desinterés del gobierno por algo que es cultural y regional», reflexionó.

Reacciones de Otros Centros de Peregrinación

Cuenca se comunicó con los obispados de Luján e Itatí, dos de los principales centros de peregrinación en Argentina, y confirmó que en esos lugares nunca se había exigido un pago similar.

La Base Legal del Cobro

Vialidad Nacional defendió el canon, argumentando que el cobro está establecido en la Ley Nacional de Tránsito. Años anteriores no se percibió este canon porque los organizadores no habían solicitado el permiso correspondiente, según señalaron voceros de la entidad.

El artículo 60 de esta ley establece que se puede cobrar por el uso de la vía pública «para fines extraños al tránsito», incluyendo «manifestaciones, mitines y exhibiciones». Así, el cobro se justificó por la naturaleza del evento, en este caso, una manifestación religiosa.