Un nuevo análisis de la Fundación Encuentro revela que un repartidor de aplicaciones como Rappi o PedidosYa necesita realizar un mínimo de 15 entregas diarias los siete días de la semana para mantenerse por encima de la línea de pobreza. Si opta por tomarse un día libre, esta cifra asciende a 20 entregas, y si decide descansar dos días, deberá completar 23 entregas diarias, explica Sol Prieto, socióloga y autora del estudio, en diálogo con medios locales.

La Canasta Básica y el Trabajo de Delivery

Según Prieto, el Coeficiente de Alcance del Pedido Promedio (APP) permite entender cuántos pedidos debe realizar un repartidor para enfrentar el costo de vida en Argentina. Para un hogar tradicional de cuatro miembros, se requieren casi 500 pedidos mensuales para alcanzar la canasta básica.

Los Ingresos Promedio Por Entrega

El informe detalla que el valor promedio recibido por un pedido, sin incluir propinas, es de aproximadamente $2.553,60. Sin embargo, este monto varía dependiendo de factores como distancia, tiempo y cantidad de pedidos acumulados.

Para ser más específicos, el promedio por pedido en Rappi es de $2.393,40, mientras que en PedidosYa alcanza los $2.713,80, destacan los datos recopilados.

Claves del Ingreso de un Repartidor

El informe resalta varios puntos críticos sobre la actividad:

Un hogar tipo de cuatro integrantes necesita 461 pedidos mensuales para cubrir la canasta básica, y para llegar al salario mínimo vital y móvil, se requieren 126 pedidos.

Los Desafíos de la Actividad

Prieto señala que muchos trabajadores de delivery no llegan a cumplir con estas cifras, ya que consideran este empleo como un ingreso adicional. El APP tiene como objetivo ilustrar los desafíos significativos que enfrentan estos trabajadores en su vida cotidiana.

Un Vistazo a las Apps de Delivery

El estudio también destaca que estas plataformas han transformado el mercado laboral, concentrando cada vez más trabajadores, especialmente jóvenes y migrantes. Sin embargo, la falta de estándares salariales y condiciones laborales claras plantea desafíos importantes.

Los repartidores, aunque no se clasifiquen bajo un modelo tradicional de empleo, mantienen largas jornadas laborales, dependen de las decisiones de las empresas y enfrentan una incertidumbre constante en sus ingresos.

Costos Ocultos del Trabajo

Además, deben asumir una serie de costos como combustible, mantenimiento del vehículo y pagos de impuestos. Esto impacta directamente en su capacidad de ahorro y en sus ingresos disponibles.

El Coeficiente de Alcance del Pedido Promedio se presenta como una herramienta valiosa para entender estas dinámicas, proponiendo un marco claro y accesible que refleja la realidad de los trabajadores en esta sector.