¡Una Batalla Diplomática! Argentina se Prepara para la Carrera por la Secretaría General de la ONU
El proceso para designar al próximo Secretario General de la ONU ya ha comenzado, y destaca la participación de dos candidatos argentinos con notables trayectorias en el ámbito internacional. La elección, clave para la diplomacia mundial, se llevará a cabo a finales de 2026.
Rafael Grossi: El Diplomático en el Ojo del Huracán Nuclear
Rafael Grossi, actual director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), se perfila como un sólido candidato. Con una carrera enfocada en la diplomacia y la resolución de crisis nucleares, Grossi ha enfrentado desafíos significativos, especialmente en su relación con Irán, donde ha solicitado mayor transparencia en su programa nuclear.
El argentino, que presentó su candidatura en abril pasado, cuenta con el respaldo del gobierno de Javier Milei. Sin embargo, su actual cargo en el OIEA podría presentarle un dilema, ya que la normativa de la ONU requiere que renuncie antes de avanzar en su candidatura.

Virginia Gamba: Una Voz Femenina en la Carrera por la ONU
Por su parte, Virginia Gamba, quien se destacó como Representante Especial del Secretario General en temas de violencia contra niños en conflictos armados, ha decidido lanzarse a la carrera de manera independiente. Gamba trae consigo más de 50 años de experiencia en resolución de conflictos y gestión de crisis.
Con intervenciones en situaciones como el desarme civil en Sudáfrica, así como investigaciones sobre el uso de armas químicas en Siria, Gamba busca romper la tradición y convertirse en la primera mujer en liderar la ONU. Ella argumenta que su experiencia de campo es esencial para abordar los desafíos actuales del mundo.

Desafíos y Expectativas en la Delegación Argentina
La contienda por la Secretaría General se da en un contexto donde Naciones Unidas busca incluir a más mujeres en posiciones clave. Hasta el momento, no ha habido una líder femenina en este cargo, lo que añade un matiz significativo a la carrera, particularmente para Gamba, cuya candidatura representa una inercia hacia el futuro.
El respaldo a Gamba proviene no solo de su trayectoria, sino también de su habilidad para generar consenso entre diversos grupos en situaciones complejas. Su singular enfoque en la gestión de crisis y desescalada la coloca en una posición envidiable frente a otros candidatos.
La Competencia Latinoamericana se Intensifica
Otros reconocidos nombres también están en la lista de aspirantes, como Michelle Bachelet, ex presidenta de Chile, y Alicia Bárcena de México, quienes aportan prestigio a la contienda. Entre los candidatos se suman figuras como Rebeca Grynspan y Christiana Figueres, lo que realza la importancia de esta elección para América Latina en el ámbito internacional.

A pesar de la fuerte competencia, las encuestas muestran a Gamba entre las favoritas, mientras que Grossi continúa con su labor internacional. Ambos representan el futuro de la diplomacia argentina en una etapa que podría redefinir el liderazgo global.
