Un Ingreso Impactante en el Escenario Diplomático

En un evento que promete establecer relaciones más dinámicas, David Cairns se presentó en la celebración del 77 cumpleaños de Carlos III. En este contexto, el embajador no escatimó en humor al utilizar la frase «no hay plata», una expresión familiar en los círculos políticos de Argentina.

Un Discurso Diferente

Este encuentro, caracterizado por una atmósfera más relajada y distendida, permitió que Cairns optara por un discurso menos protocolar, acercándose más a un estilo de stand up. Con audacia, el embajador decidió hablar en español, desafiando las expectativas previas y haciendo sonreír a los asistentes.

Celebraciones con Sabor Argentino

El embajador no solo se centró en aspectos serios en su discurso. En una muestra de ingenio, mencionó que aunque en el pasado se había regalado la Torre de los Ingleses en el primer centenario de las relaciones entre ambos países, en esta ocasión presentaron versiones en tortas de la Torre y el Obelisco.

Conexiones que Trascienden Fronteras

La celebración incluyó un video que rememoraba la relación bilateral, destacando momentos históricos como la visita del príncipe Carlos en 1999, donde se le ve disfrutando del tango y jugando polo. Cairns reveló que una encuesta en el Reino Unido identificó el fútbol y la música como los principales lazos culturales con Argentina.

Asistentes Destacados en el Evento

La lista de invitados estuvo llena de figuras notables, incluidos los nuevos embajadores de Estados Unidos, Peter Lamelas y su esposa Stephanie. A pesar de su nueva posición, Lamelas mantuvo un perfil bajo, evitando hablar con la prensa mientras se adaptaba al nuevo entorno.

Diversas Reacciones entre Invitados

Entre los asistentes argentinos, la representación judicial fue significativa, supplantando a los miembros del gabinete de Javier Milei. Esto incluyó a destacados juristas y funcionarios del gobierno, quienes generaron un ambiente propicio para el diálogo.

Un Toque de Distinción en la Celebración

La embajadora asistente, Sally Louise Cawdery, causó revuelo entre los bartenders al demostrar su paladar exigente, solicitando un cóctel con un ingrediente específico, lo que agregó un toque de sofisticación al evento.

Fiesta y Networking

El evento culminó con una actuación de una banda argentina, prolongando la celebración más allá de lo esperado. Los invitados también disfrutaron de un after party en ‘La Mano de Dios’, el pub inaugurado el año anterior dentro de la embajada británica, que se ha convertido en un punto de encuentro para las relaciones culturales entre ambos países.