Sheikh Hasina, ex Primera Ministra de Bangladesh, condenada a muerte en un veredicto polémico
El Tribunal Penal Internacional ha dictado una sentencia de muerte contra Sheikh Hasina, quien se encuentra en el exilio en India, tras su responsabilidad en la violencia durante las protestas estudiantiles de 2024.
El Tribunal, instituido en parte por sus propias gestiones, ha hallado culpable a Hasina de incitar a la violencia y de autorizar el uso de la fuerza letal durante las manifestaciones de agosto del año pasado. La ONU ha confirmado que al menos 1,400 personas, en su mayoría civiles, perdieron la vida bajo su gobierno.
El fiscal principal de Bangladesh destacó que la exfuncionaria «manchó sus manos de sangre», refiriéndose a la gran cantidad de jóvenes y ciudadanos que perdieron la vida en las calles. Afirmó que esta sentencia representa un cierre en la búsqueda de justicia para el país.
Un veredicto rodeado de controversia
Sheikh Hasina ha rechazado las acusaciones en múltiples ocasiones, argumentando que la condena es un acto de motivación política. Tras los disturbios, fue vista huyendo en un helicóptero, y a través de un comunicado, defendió su inocencia.
En el mismo fallo, el exministro del Interior, Asaduzzaman Khan Kamal, también fue sentenciado a muerte, mientras que el exinspector general de la policía, Chowdhury Abdullah Al-Mamun, recibió una pena menor de cinco años de prisión luego de testificar a favor del Estado.
Posibilidad de apelación y futuro incierto
La sentencia podría ser apelada ante el Tribunal Supremo. Sin embargo, Sajeeb Wazed, hijo y asesor de Hasina, aclaró que no se buscará una apelación a menos que un gobierno democrático sea establecido, en el que participe la Liga Awami, el partido de Hasina.
