La Industria Metalúrgica Argentina Sigue en Caída: Octubre Trae Nuevos Desafíos
La actividad metalúrgica en Argentina enfrenta un panorama complicado, con una caída interanual del 4,6% en octubre y un leve repunte del 0,3% respecto al mes anterior, según el último informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA).
El sector metalúrgico acumula un incremento del 0,1% en los primeros diez meses del año, comparado con el mismo periodo de 2024. Sin embargo, las proyecciones no son alentadoras. “Octubre intensificó la desaceleración general en nuestra actividad, con varios sectores aun presentando variaciones interanuales negativas sin signos claros de cambio”, afirmó la ADIMRA.
Uso de Capacidad Instalada en Niveles Críticos
La utilización de la capacidad instalada sufrió una baja de 6,0 puntos porcentuales en comparación con octubre del año anterior, alcanzando uno de los niveles más bajos en la historia reciente. Además, el índice de empleo en el sector también se vio afectado, con una reducción del 2,9% en términos interanuales y un leve descenso del 0,1% mensual.

¿Qué Sucede con los Sectores Específicos?
Aunque durante el primer semestre hubo un desempeño destacado en los sectores de Maquinaria Agrícola (-0,8%) y Carrocerías y Remolques (+2,6%), octubre presentó señales de desaceleración. En el caso de la maquinaria agrícola, el sector continúa atravesando un ciclo de debilidad. Por otro lado, carrocerías y remolques mantienen un crecimiento, aunque con una tendencia de desaceleración respecto a los picos alcanzados en el primer semestre.
En términos de las áreas más comprometidas, las Autopartes (-2,5%), Fundición (-12,7%), y Bienes de Capital (-3,9%) consolidan un escenario crítico, mostrando una marcada fragilidad sin indicios de recuperación a corto plazo. Estos segmentos representan los principales focos de contracción en el ámbito metalúrgico, según ADIMRA.
Perspectivas Desalentadoras para el Futuro
La mayoría de las empresas encuestadas, un 67,4%, anticipan que su producción se mantendrá igual o disminuirá, reflejando un ambiente de incertidumbre. Además, las expectativas sobre el empleo son igualmente preocupantes; el 83,3% de las compañías no prevé cambios en su plantilla o considera hacer ajustes en el personal.
