El descubrimiento de que una niña
vietnamita con la cepa H5N1 de la gripe ha presentado
resistencias al oseltamivir, el principio activo en el que se
basa Tamiflu, unido a las dificultades del fabricante (Roche) para
atender todos los encargos, han hecho que algunos expertos fijen su
atención en Relenza, comercializado por GlaxoSmithKline (GSK).
Un estudio, publicado recientemente
en 'The New
England Journal of Medicine' y firmado por la doctora Anne
Moscona, del departamento de Pediatría, Microbiología e Inmunología
de la Universidad Cornell (Nueva York, EEUU), concluye que, junto
con el oseltamivir, los gobiernos deberían incluir también el
zanamivir (Relenza) como parte de sus planes para prevenir una
posible pandemia de gripe.
En consecuencia, el fabricante
tendría que empezar a aumentar ya la capacidad de producción de este
fármaco, una cuestión importante puesto que hasta la fecha no ha
sido un producto muy demandado y, por lo tanto, no existe suficiente
stock.
Tanto el Tamiflu como el Relenza son
inhibidores de la neuraminidasa, una enzima que se encuentra en la
superficie del virus de la gripe, y actúan impidiendo que éste se
replique. Pero se diferencian en la forma en que penetran en el
organismo, ya que el Tamiflu se toma de forma oral y llega a la zona
gastrointestinal, mientras que Relenza tiene que se inhalado
y entra directamente en el tracto respiratorio. Ninguno conlleva
efectos secundarios importantes.
Según los resultados de las
investigaciones realizadas hasta el momento, ambos fármacos son
eficaces para reducir los síntomas de gripe, de las cepas A y B,
si se administran en las primeras 48 horas. Sin embargo,
mientras oseltamivir ha demostrado ser efectivo para la variante
H5N1 de la gripe en humanos, el zanamivir no ha sido estudiado aún
en esos casos. Por eso, la OMS recomienda el Tamiflu en primer
lugar.
Pero dada la alerta que ha generado
la llegada de la gripe aviar a Europa, muchos especialistas
consideran que Relenza tendría que empezar a formar parte de las
estrategias preventivas adoptadas por las autoridades sanitarias.
Un producto caro
Relenza está disponible en España
desde enero del año 2000 para el tratamiento de la gripe. No
obstante, como la Seguridad Social no lo financia, su precio es
bastante elevado (unos 23 euros) y casi no se vende.
Sin embargo, la propagación de la
cepa H5N1 de la gripe aviar, que según la OMS ya es endémica
en zonas de Indonesia, Vietnam, Camboya, China y Tailandia, ha
llevado a la compañía GSK a solicitar a las autoridades sanitarias
de EEUU y la UE el uso en profilaxis del antiviral RELENZA®.
Según han informado desde la
farmacéutica, la actual preocupación por una pandemia de influenza
ha hecho crecer la demanda de Relenza, por lo que "el laboratorio
está trabajando activamente para incrementar la capacidad de
producción".
Asimismo, Roche ha anunciado que
incrementará en 2007 su ritmo de producción del antiviral Tamiflu
hasta alcanza los 300 millones de tratamientos anuales, lo que
supone multiplicar por 10 la capacidad de fabricación de este
fármaco en 2004